lunes, 7 de noviembre de 2011

Vamos a comernos

Sabes ese momento en que mis ojos se quedan clavados en los tuyos,
en el cual me pierdo en tu mirada, y mis labios,
desean comerte como si no hubiese mañana.

Es ese, ese preciso instante en que mi corazón
me garantiza que vas a ser mía, pase lo que pase.

Gonzalivsky


1 comentario:

Rubén dijo...

Te quiero Gonzalo, te quiero.