martes, 13 de noviembre de 2018

Seguir imaginándote

Luchar por no olvidar esa suerte de cosas que uno desea recordar para siempre, pero que lamentablemente se vuelven ceniza del pasado si se deja de usar la memoria para refrescarlas: una risa al viento entre el bosque, el abrazo profundo y agradecido que prosigue a la honestidad de quien da sin pedir a cambio, la piel contra la piel en la oscuridad, el sabor dulce de los labios que se buscan, la música pura de un orgasmo acompañada por los dedos que se entrelazan.

Luchar, al fin y al cabo, por seguir creando los recuerdos del mañana.

Gonzalo

miércoles, 5 de septiembre de 2018

Ojalá te enamores

"Ojala te enamores de alguien que sepa lo que vales, que a cada una de esas cosas que tú llamas -defectos- les ponga tu nombre y sueñe con abrazarlos cada noche. Alguien a quien no le importe la hora que sea cuando sienta la necesidad de decirte que te quiere, que te despierte con un beso de buenos días y te dé las buenas noches con uno de esos abrazos eternos que terminan solo cuando el sueño vence. Ojalá te enamores de alguien que te diga cada día que eres preciosa, que no ha visto algo más bonito en toda su vida. Alguien a quien no le dé miedo decirte en voz alta que está loco por ti, que lo grite bien fuerte, bien alto, sin importar nada más que la sonrisa que te provoque, sabiendo que lo dice desde el corazón".

Me partí el alma y el pecho para ser ese alguien. Me pediste a gritos que fuese ese alguien. Y cuando este amasijo de huesos reunió el valor para ser quien tanto tiempo llevabas esperando que fuese, quien tanto tiempo llevaba queriendo ser, aún atrapado entre los barrotes del miedo que me daba el abismo de perderte, una vez rotos, resultó que daba ya igual quien fuese.

Ojala no hubiese sido ese alguien,
porque ahora,

                  ya no puedo dejar de serlo.


Gonzalo.